EN su momento fue Mc Donald's y su política de reclutamiento de adolescentes en edad escolar que querían trabajar para solventarse la cerveza los fines de semana. Ahora son los Call Centers. De repente todos trabajaron/ trabajan/ conocen a alguien que trabaja o trabajó de telemarketer. Todos coinciden en lo mismo: las secuelas son irreversibles. Son más bien como una secta. El telemarketer reúne todas las condiciones para ser un personaje de Juego de Rol.