viernes, 30 de diciembre de 2005

.llegaron ya

Y como era de esperarse, los Reyes Magos, que eran tres, Melchor, Gaspar y el Mago Capria, antes de ir a visitar al niñito Jesú' como desde hace dosmil y pico de años, pasaron por mi casa y me dejaron un Baileys. Y no me digan que no puede ser, que están adelantados y la que sé yo, porque los reyes pasan por mi casa cuando a mí se me da la gana.

miércoles, 28 de diciembre de 2005

.qué bonita vecindad

EL cartel apareció hace unos días pegado en el espejo del hall de entrada del edificio. Un indignadísimo vecino denunciaba el robo de su ropa de la soga de la terraza. La respuesta no se hizo esperar. Otro vecino, en plan solidario, pegó un segundo cartel y corroboró la denuncia, afirmando que a él también le había faltado ropa de la soga. Luego alguien respondió y les hizo ver lo ridículo de la situación, y ya nadie pegó más papelitos en el espejo.

domingo, 25 de diciembre de 2005

.en navidad

FUIMOS, MeSh y yo, al show navideño de Boom Boom Kid en El Teatro de Flores. Pero entramos a un concierto de BBK y salimos de uno de Fun People. Un bonito regalo, haber cambiado tan drásticamente su esquema. Mención de honor al espectáculo aparte que dio el guitarrista; al estado físico del artista anteriormente conocido como Nekro y a sus (¿falsas?) rastas; y a la felicidad de uno de los plomos que cantaba todas las canciones y se enojaba si la gente no aplaudía al final. We want more!

viernes, 23 de diciembre de 2005

.hola, ¿qué tal?

YO quisiera saber cuánto invierte el Gobierno de la Ciudad en poner en cada esquina un pelotudo con gorrita que le dice a la gente cómo cruzar la calle. Aunque quizá no les pagan un centavo, y tienen vocación de molestar. Insoportables.

EL otro día acompañé a mi amiga Javiera a la peluquería La Lúdica, que queda en Soler y Malabia, en pleno Palermo Soho. Sólo voy a decir, y será suficiente, que en el revistero, donde suelen estar el último número de Gente y la más reciente edición de la revista Pronto, había, entre algunas revistas de diseño, un libro sobre problemas de filosofía y metafísica hindú y otro sobre i- ching.

jueves, 8 de diciembre de 2005

.what? I can't hear you!

HACE poco leí sobre esto en algún otro lugar y pensé "pobre pibe, qué molesto lo que le pasa. Pocas cosas me molestan tanto como esa". A patir de ese momento empezó a pasarme lo mismo todo el tiempo: voy caminando por la calle con el discman y la gente me interrumpe la marcha (y la música y la vida) para preguntarme PELOTUDECES. "Si sigo caminando por acá llego a Santa Fé, ¿no?"; "¿Cómo hago para llegar a Charcas?"; "¿Dónde puedo encontrar un locutorio?", etc. El colmo fue cuando esperaba para cruzar la calle y una conchuda me tiró de la manga para preguntarme la hora. WTF???!!! ¿Qué hacés? Primero: DON'T FUCKING TOUCH ME. Segundo: ¿No ves que tengo los auriculres puestos? La única razón por la que una persona va caminando por la calle con un disco de Cucsifae atornillado a los oídos es que quiere aislarse del mundo. La verdad es que no entiendo. Comprense una Guía T.