miércoles, 28 de junio de 2006


Así que ya saben. Si lo, ven avisen. O corran. Y después avisen.

miércoles, 21 de junio de 2006

ME estoy mudando. Mi casa es un hervidero de cosas completamente inútiles desparramadas por todos lados. Sólo puedo deshacerme de algo cuando olvido el valor sentimental que me hizo quedarme con esa cosa. Tengo muy buena memoria, de modo que soy una máquina de acumular papelitos, folletos, tarjetitas y demás basuras inservibles.

viernes, 16 de junio de 2006

NO soy capaz de levantarme con tiempo para llegar a una hora decente a donde sea que tenga que ir, pero hoy me levanté a las ocho de la mañana para encerrarme en un barsucho de San Telmo a mirar el partido rodeada de cuarentones con delirios de director técnico, y después irme a laburar. Era la única mina en el bar. Me trataron como si fuera la princesa de Holanda. Las mujeres deberían aprender a disfrutar del fútbol y de lo que genera en los tipos y dejarse de romper las pelotas un poco.

lunes, 12 de junio de 2006

MI último sueño fue más o menos así:

Básicamente, el mundo estaba conmocionado porque había un niño de tres años en órbita. En un sistema planetario paralelo al Sistema Solar, compuesto por unos planetitas chiquititos y blancos, había un pibe en órbita, como si fuera un satélite de uno de los planetitas. El fenómeno se podía avistar tranquilamente desde la Tierra, pero cuando uno miraba al cielo veía todo como si fuera el dibujo de un átomo, y el nene era un puntito blanco recorriendo lo que vendrían a ser las órbitas elípticas. En un parque gigante se habían agolpado curiosos y periodistas a ver. Todo esto sucedía de noche. De pronto, se hacía de día, alguien gritaba
¡guarda, guarda! y caía del cielo una especie de satélite monstruoso, del tamaño de un edificio. El satélite era el nene de tres años. Inmediatamente después, explotaba todo en cámara lenta. Yo no me inmutaba. Durante todo el sueño, todos los presentes se reían como si estuvieran en la mejor fiesta de sus vidas.


Se escuchan opiniones y terapias alternativas. Gracias.

jueves, 8 de junio de 2006

para muestra, basta un botón

ELLA vive felizmente con su novio, desde hace casi un año, ya. La madre de él la detesta. Es una de esas mujeres que no crían hijos sino lacayos, y acusan a sus nueras por el delito de robarles no sólo a sus vástagos, sino también a sus sirvientes.
Un día, él le regaló flores a ella. Ella agarró un frasco de aceitunas, y con todo el amor del mundo le quitó la etiqueta, lo lavó, y le pintó lunares de colores. Allí puso las flores que le había regalado su novio. Poco tiempo después, recibió la visita de su suegra. La vieja no dijo nada. Y al otro día volvió, y le regaló un florero.

lunes, 5 de junio de 2006

UN día entero. Ese tiempo me llevó ordenar mi placard. Soy un absoluto desastre.